El malestar se está haciendo notar entre los usuarios de EDEA en San Clemente. A las abultadas facturas, producto de los tarifazos que no paran, se le suma el mal servicio de la empresa, que es la mayor distribuidora de electricidad de la Provincia de Buenos Aires.

Tiene un servicio tercerizado, de entrega de facturas en domicilio, que viene generando quejas desde principios de 2017. Al usuario no le llegan las facturas, y esto lo convierte en moroso. EDEA no se detiene a la hora de sumar intereses, y avanza hacia el corte del servicio. El aviso de corte implica una erogación que debe pagar el usuario. Finalmente es el usuario, el que se queda sin energía eléctrica, por falta de pago.

Personas mayores con días sofocantes, son sometidas a largas colas, ya sea para pagar facturas obscenas, o bien, para que se le restablezca el suministro cortado.

El personal de la oficina de San Clemente atiende amablemente a los vecinos, eleva los reclamos, sin embargo el servicio está cada vez peor.

Un grupo de residentes afectados por estas irregularidades, ha alertado a la empresa, sobre la necesidad de cambiar el servicio de entrega de facturas, por uno que sea eficiente. En marzo de 2017 se encontraron en un baldío, decenas de facturas impagas, que nunca llegaron a sus dueños.

Opinión tuvo acceso a un documento que redacta un grupo de clientes, se trata de un Recurso de Amparo, y no es en éste caso por aumento en las facturas… Es porque las facturas no llegan, y la empresa con total desidia, convierte al usuario en moroso, de éste modo, la factura se engorda aún más, hasta que llega el aviso de corte que suma más plata por pagar.

Los empresarios siguen llenando sus bolsillos, y el que queda en estado de desamparo es el usuario.

Lilia Galarza (Gala).