Bajo el convencimiento que “puede haber exigencia sin repitencia”, esta semana el Ministro de Educación bonaerense, Alberto Sileoni, hizo público el nuevo esquema que se implementará en el sistema educativo de nivel secundario en la provincia de Buenos Aires, y que comenzará a ser similar a los esquemas que poseen las universidades. No obstante, los medios nacionales interpretaron que con estos cambios ya no existe la repitencia en las escuelas secundarias. Es por ello que desde Opinión dialogamos con Horacio Rossano, Jefe Distrital de la Región XVIII, quien explicó los alcances de esta nueva estructura educativa.
En principio, el profesor Rossano aclaró que “no se termina la repitencia”, ya que según se establece en el nuevo esquema, “si un alumno no aprueba ninguna materia ni durante el año ni en el período de fortalecimiento, no va a pasar de año”, ya que en definitiva “al otro año no tiene ninguna materia nueva para poder cursar”, sino que se apunta a un sistema similar al que funciona en universidades y terciarios, lo cual sostuvo que “es el cambio que nosotros realmente queríamos”. Asimismo, aclaró que no se trata de un proyecto improvisado, sino que indicó que “desde hace un tiempo se viene trabajando en distintas comisiones en secundaria en toda la provincia de Buenos Aires, en el proyecto llamado Conversaciones Pedagógicas”.
Precisamente, desde estos encuentros señaló Rossano que “fueron saliendo muchas propuestas que se fueron elevando a la provincia”, y que puntualmente el año pasado “hubo un intento de modificar el régimen académico exclusivamente para el nivel secundario”, pero que “lamentablemente no se pudo llevar adelante”. Sin embargo, mencionó que se continuó trabajando en ello, lo cual posibilitó que “ahora se presenta otra vez este nuevo régimen académico”, el cual sostuvo que “es una necesidad para la educación secundaria, tanto para docentes como para alumnos”.
En líneas generales, el funcionario explicó que se implementará “un cambio de los nuevos diseños curriculares, que es donde se basan cada una de las materias para trabajar los docentes”, ya que señaló que “hay una actualización de estos diseños”, como así también “la implementación de nuevas estrategias por parte de los docentes”. No obstante, mencionó que el principal cambio se refiere “a la trayectoria de los alumnos”, lo cual ha surgido en base “al análisis que se viene haciendo de las problemáticas que tenemos en el nivel secundario”, ya que señaló que “el nivel secundario tiene un gran problema de repitencia en el Ciclo Básico, lo que sería primero, segundo y tercer año”, donde señaló que “hay muchos chicos con sobreedad, por tanta repitencia”.
Según indicó Rossano, a ello se suma la deserción escolar que se registra en mayor medida en el Ciclo Superior Orientado. En este aspecto, manifestó: “Parece como que la educación secundaria es una pirámide de acuerdo a la cantidad de chicos que ingresan a primer año y los que llegan a sexto, y tiene que ser una caja curricular compacta, porque la educación secundaria es obligatoria, pero lamentablemente existe esta deserción, entonces el problema hay que atacarlo”. Hasta el momento, recordó que el sistema establecía que “si un chico en primer año aprobó 7 materias y desaprobó 5, repite, y al otro año cursa el mismo año y cursa las 7 materias que ya tenía aprobadas”, por lo que se preguntó “si uno cursó una materia durante todo un año y la aprobó, ¿por qué la va a tener que cursar al otro año nuevamente?”.
En este aspecto, el Jefe Distrital recordó que “el nivel secundario es el paso previo a la universidad o el instituto superior, donde cambia totalmente el régimen académico”, por lo que consideró que es necesario que “nos acercamos un poco más para que el chico tenga toda esta preparatoria para la continuidad de sus estudios superiores”, y en este sentido explicó que es donde se modifica el esquema. Al respecto de ello, puntualizó: “Si el alumno aprueba tantas materias al otro año no vuelve a recursar las materias. Sigue avanzando con todas las materias aprobadas y va a tener unos períodos de fortalecimiento que van a ser en diciembre y en febrero para aquellas materias que le quedaron, de acuerdo a los contenidos que le hayan quedado”.
Precisamente, la clave del nuevo esquema plantea el trabajo de reforzar las materias que el alumno no ha podido rendir, por lo que el profesor Rossano indicó que “se va a trabajar específicamente en ese período de fortalecimiento de los contenidos que le quedaron dentro de esas materias”, al mismo tiempo que independientemente de aprobarlas o no “el chico puede seguir su trayectoria y puede seguir avanzando y no tener que recursar todo un año teniendo ya gran parte de las materias aprobadas”. Por ello aseveró que este “es un paso muy importante para el alumno”, al tiempo que destacó que “va a ayudar mucho a no tener sobreedad en el nivel básico”, ya que en definitiva advirtió que con el esquema actual “tenemos alumnos 7, 8 o 9 años en el nivel secundario que después no terminan recibiéndose en el nivel secundario y se van a lo que sería Fines”.
En este aspecto, el profesor Rossano puso de relieve la importancia de que el alumno “pueda tener la posibilidad de terminar el secundario en tiempo y forma a los 17 o 18 años en la secundaria orientada”, lo cual aseguró que “es mucho mejor”, ya que en definitiva resaltó que este cambio “va a ser muy importante para esta trayectoria”. Según informó, el nuevo esquema ya ha sido aprobado por el Concejo Federal de Educación, por lo que ha sido remitido a todos los establecimientos educativos de la provincia de Buenos Aires e indicó que “lo comenzamos a trabajar con todos los directivos y con todo el personal de la educación secundaria”, ya que precisó que “se comienza a implementar en febrero del año que viene”.

Lic. Graciela Marker