Gracias a la denuncia de los vecinos, la fiscalía ordenó el allanamiento del lugar donde se encontraban los caninos hacinados y en malas condiciones, marcando un precedente en el distrito sobre las denuncias de maltrato animal bajo la Ley 14.346.
La Directora de Cuidado Animal y Zoonosis, Eva Schlegel, relató: “En el lugar los perros estaban hacinados, se alimentaban de comida tirada en el piso, entre las heces con sangre y gusanos. Había cinco perros muertos enterrados. Nosotros levantamos el miércoles un caniche de la vereda, totalmente débil, lleno de garrapatas, con problemas en el hígado, anémico y lo mandamos a hacer análisis”.
“En principio, la fiscalía pidió una inspección ocular, a la cual la señora se negó. Al adjuntar pruebas de los animales que estaban en malas condiciones, se logró el allanamiento”, explicó Schlegel.
Tras lo ocurrido, desde la Dirección de Cuidado Animal y Zoonosis revisaron a los 15 animales, que se encontraban “todos con fiebre, salvo los que estaban en la calle”. Posteriormente, los perros fueron distribuidos en el refugio “Rubio de la Costa”, que ayudó con el tránsito de 10 perros, mientras que los otros cinco quedaron en revisión en zoonosis para luego ser dados en adopción. n