La ciudad de General Madariaga vivió un fin de semana distinto con la fusión de dos propuestas culturales que, juntas, ofrecieron un espectáculo que fue muy bien recibido por vecinos y visitantes. La tradicional Fiesta de la Cerveza se unió al festival Marock y el resultado fue una experiencia que combinó música en vivo, gastronomía y emprendedurismo local.
El sábado la actividad comenzó a partir de las 17 y se extendió hasta las 2 de la madrugada del domingo. El domingo las bandas arrancaron pasadas las 14 y siguieron sonando hasta entrada la noche, con un repertorio que abarcó distintos géneros y convocó a públicos diversos.
En los alrededores del escenario principal, se instalaron puestos de cerveza artesanal, foodtrucks y stands de emprendedores locales, que registraron muy buenas ventas durante ambas jornadas. “Gracias a todas las bandas que subieron al escenario por la entrega de cada presentación”, destacaron desde la organización. También hubo reconocimiento a los cerveceros locales y al equipo del Marock por una iniciativa que demostró ser un gran acierto.
La propuesta no solo aportó una alternativa recreativa de calidad sino que también potenció el movimiento económico en la ciudad, reforzando a General Madariaga como sede de eventos culturales que promueven la producción local y el encuentro comunitario.