En el Espacio Multicultural de San Bernardo se realizó la entrega de los permisos anuales a productores de pochoclos, garrapiñadas y productos derivados que desarrollan su actividad en peatonales y plazas del Partido de La Costa. La medida se enmarca en una ordenanza municipal que regula esta actividad económica, principalmente durante la temporada alta, aunque en algunos casos también permite su ejercicio a lo largo de todo el año.
El secretario de Producción, Empleo y Trabajo, Martín Poustis, explicó que la iniciativa apunta a reconocer y acompañar a trabajadores que forman parte del entramado productivo local. Señaló que se trata de productores que históricamente recorren las peatonales del distrito y que, a partir de esta normativa, pueden hacerlo con respaldo legal y reglas claras, fortaleciendo así una actividad económica vinculada a la producción de bienes.
Desde el área de Ordenamiento Urbano, el secretario Adrián González destacó que los permisos brindan tranquilidad tanto a los trabajadores como al Estado, ya que permiten garantizar que cada puesto esté ocupado por la persona habilitada y en el lugar correspondiente. Remarcó que las inspecciones que se realizan son de rutina, dado que los controles previos ya fueron efectuados por la Secretaría de Producción, y subrayó que se trata de expedientes que cumplen con todos los requisitos exigidos.
González señaló además que el proceso de evaluación de cada solicitud se viene desarrollando de manera exhaustiva desde hace dos años, a partir de la presentación formal de los vecinos y del análisis correspondiente por parte de las áreas municipales. En ese sentido, remarcó que la entrega de permisos no es aleatoria, sino el resultado de una política pública que busca estar cerca del vecino y conocer quiénes ejercen esta actividad en las peatonales, con previsibilidad y transparencia.
Por su parte, Poustis afirmó que el desarrollo de la comunidad está estrechamente ligado al trabajo y a la producción, y que el rol del Estado es generar reglas de juego claras que otorguen certidumbre y tranquilidad a quienes producen y trabajan. Recordó que esta política comenzó a implementarse el año pasado por decisión del intendente Juan de Jesús, con el objetivo de consolidar condiciones que permitan sostener y ordenar una actividad que existe desde hace décadas y que forma parte de la identidad local.
La venta de pochoclos en las peatonales, realizada por vecinos del distrito, es una postal característica del Partido de La Costa. Desde el municipio remarcaron que su ordenamiento no solo busca garantizar el cumplimiento de la normativa, sino también reconocer su valor social y productivo, promoviendo el trabajo local y el desarrollo económico con una mirada de largo plazo. n