Tal como les venía contando hace algunas semanas atrás, tengo que ir a CABA una o dos veces al mes. Apenas llego con mi “catramina”, lo llamo a VN para saber si podemos en algún momento encontrarnos.
Son más las veces que no podemos sentarnos frente a frente que las que si, por eso llame una vez que llegue al “hotelucho” de Constitución donde suelo parar y ¡oh milagro! VN estaba en Buenos Aires. No termine de saludarlo que me dijo que conoció un bodegón en San Telmo y quedamos en encontrarnos a las 22 hs en ese lugar.
A la hora fijada llegue en un taxi y tuve la misma sensación que tengo siempre de que San Telmo tiene algo de Paris, de algunos barrio donde en los lugares para cenar o tomar un café se reúnen escritores, pintores, artistas de todo tipo con economistas, Ceos, políticos de “alta gama”, etc.
Conseguí ubicarme en una mesa para poder ver la puerta, no terminaba de sentarme cuando llego VN, lo abrace con profundo afecto y sentí la reciprocidad del gesto. Después de los saludos protocolares, le dije:
E: - siento un profundo placer cada vez que tenemos contacto, ya sea por teléfono o personalmente.
VN: - a mí me pasa lo mismo. Son momentos muy especiales porque no siempre se encuentra uno con la posibilidad de compartir temas sin ningún tipo de antagonismo.
VN pidió un guiso de lentejas para dos, cuando vinieron con la fuente, yo pensé en invitar a otras dos personas para comer… ¡era enooorrrmeee!. El guiso tenia de todo, chorizo, pechito de cerdo, patitas de cerdo, huesos de caracú con carne…era un guisote espectacular. Afuera hacia frio y llovía, lo cual hacia el ambiente más cálido y confortable frente a la fuente del guiso de lentejas. Colgaban de las paredes viejas fotos de artistas argentinos y extranjeros de la época del 40 al 60, había también discos antiquísimos de orquestas típicas y algunos cantantes liricos.
El mozo nos sirvió en unas cazuelas precalentadas las primeras cucharadas con un cucharon.
E: - estas lentejas le levantan el ánimo a un “muerto”.
VN: - hace mucho me lo habían recomendado algunos amigos pero hace unos días tenía que invitar a una señorita, no podía hacerlo en los lugares que suelo frecuentar y me acorde de este lugar.
E: - ¡señorita de buen apetito!
VN: - ¡si, comió para toda la semana y yo también!
E: - está todo muy tranquilo a nivel internacional, ¿no?
VN: - se está preparando un encuentro “cumbre” entre Putin y Trump.
E: - hace mucho tiempo que los jefes políticos de esos países tan poderosos no se reúnen a hablar cara a cara.
VN: - más de 20 años.
E: - supongo que no será solamente para hablar de Croacia.
VN: - sí, también van a tocar el tema de Israel y la Franja de Gaza.
E: - los Israelitas creo que tienen la intención de anexar toda la Franja de Gaza e instalar allí las nuevas ciudades judías.
VN: - no estás tan equivocado pero es algo muy difícil de realizar.
E: - mientras tanto en nuestro país las cosas se acomodaron tal como lo habías anunciado.
VN: - y…los peronistas, a la hora de votar se juntan todos.
E: - en cambio vimos desaparecer al PRO, en tanto Milei desembarcó en un acto proselitista en la Matanza. En el barrio, la nueva Bolivia.
VN: - entre los candidatos, los políticos que acompañaron a Milei, sumando los choferes, alcanzo justo para poder extender una bandera que decía: “Kirchnerismo nunca más”.
E: - por lo que yo vi en el diario Clarín no había mas de 50 personas…
VN: - sí, más o menos…se juntaron algunos vecinos curiosos.
E: - lo que no entiendo, hablando de otro tema, es como hacen en este Gobierno para no emitir (según ellos) y cada vez hay más billetes.
VN: - dijese un amigo mío, reconocido economista, la gente de Milei “se hace trampa jugando al solitario”, porque el Banco Central le entrego al Gobierno, 12 billones de pesos en una cuenta no existente, de lo contrario, no hubiesen podido pagar los gastos corrientes.
Mire la fuente de reojo, a pesar de habernos servido un segundo plato, aún quedaba buena parte de la comida, no sé porque pensé en los hogares con chicos con capacidades especiales, en la mesa de los jubilado, en aquellas familias de las Villas…sentí como un escalofrío, me pareció ver a todos ellos detrás de la vidriera del restaurante…