La diferencia de altura entre el asfalto y la banquina de la Ruta 56, metros antes del ingreso a la ciudad por calle 25, ponía en riesgo a quienes circulaban por el lugar.

Debido al reclamo de los conductores, el municipio decidió dar respuesta y en la jornada de ayer se inició con los trabajos.

“Si bien la tarea no nos corresponde porque el mantenimiento y el estado de la calzada está a cargo de AUBASA, el intendente Santoro nos solicitó que lo hagamos para brindar una solución y evitar posibles accidentes” afirmó el funcionario Blas Guevara.

“Lo cierto es que los autos al bajar del asfalto, sufrían un gran impacto, por lo que desde la Secretaría de Servicios Generales y Mantenimiento procedimos a rellenar con tierra colorada, para luego, con la utilización de la motoniveladora,  realizar la distribución y emparejado de la misma” puntualizó.